El Gobierno federal que termina su sexenio este año, logró estabilizar la producción petrolera, pero de forma endeble, por lo que la siguiente Administración federal se enfrentará a este reto.
Para este último año del sexenio también se plantea una menor inversión ante su complicada situación financiera.
El riesgo de una caída en la producción petrolera es un problema latente en la medida en la que la paraestatal deje de invertir lo que inyectaba de recursos anteriormente en exploración y producción.
Reforma, 8 de abril, 2024.