Las bodegas de mercancía proveniente de China, operan en edificios que fueron construidos de forma irregular dentro del polígono del Centro Histórico de la Ciudad de México.
La macroplaza de Izazaga 89, fue clausurada por el Gobierno capitalino, después de determinar que no contaba con permiso para albergar bodegas, mismas que implicaban riesgo estructural para el inmueble.
Dos edificios de la Calle Joaquín Herrera registraron irregularidades en su construcción y también son usados para almacenar y comercializar productos chinos.
Reforma, 16 de julio, 2024.