1.Progresividad: El sistema tributario debe gravar proporcionalmente más a las personas con mayores recursos, y el gasto público, sobre todo el social.
2.Equidad horizontal: Las retenciones asociadas a impuestos y seguridad social deben gravar de manera igual a personas con capacidades similares.
3.Prosperidad compartida y sostenible: El sistema fiscal debe fomentar el desarrollo económico inclusivo y promover la protección del medio ambiente, sin aumentar las cargas sobre la población pobre.
4.Eficiencia y efectividad: La administración hacendaria debe ser eficiente y efectiva, basada en la confianza y en la calidad de los beneficios del gasto público, no necesariamente en la coerción.
5.Transparencia y rendición de cuentas: Es fundamental que la ciudadanía tenga acceso a información clara y completa sobre la recaudación y gestión de los recursos públicos para promover su confianza en las instituciones.
Reforma, 07 de julio, 2024.